BONITA EXCURSION POR LA PISTA DEL BOZANCO-ASEGUR
Diez de Mayo de 2011, hermoso día de primavera, sin pensarlo, me decido hacer una ruta senderista en compañía del los buenos amigos- Manolo chancas, Santi y la preciosa Ana (animadora del Centro Joven de Casares), a las cuatro y veinte de la tarde partimos desde Casares con dirección de la iglesia bajando por la cuesta de “Lombo jurde” para pasar por el río de la ropas cual subiendo a la pista nueva del bozanco por la loma de los sarruitos.
Para pasar el río necesite la ayuda del buen amigo: Fernando Martín Duarte (calé), quien se prestó voluntario para pasarme a sus costillas, el cauce del río; tengo que reconocer que pasé bastante miedo, ya que bajaba bastante agua.
El recorrido fue espectacular, sacamos muchas fotos al tiempo que contemplábamos la belleza panorámica que ofrecen estos parajes; bajamos por “arrosegur” para adentrarnos en esta bonita alquería de A segur, donde tomamos unas cervezas en el “bar el puente”.
Seguidamente emprendemos carretera arriba para llegar a Casares sobre las ocho y cuarto de la tarde. El recorrido lo hicimos a mi ritmo que, ni yo mismo me lo creo, pues doy gracias a Dios el haberme dejado experimentar esta sensación, contemplar una vez más la belleza de mí querido Casares.
Casares, Casares mío, qué bonito se te ve, desde el otro lado del río cuando quiere atardecer.
Con tus casitas de piedra y con tus huertos pequeños, que parecen escaleras, adornan a nuestro pueblo. Tani
Diez de Mayo de 2011, hermoso día de primavera, sin pensarlo, me decido hacer una ruta senderista en compañía del los buenos amigos- Manolo chancas, Santi y la preciosa Ana (animadora del Centro Joven de Casares), a las cuatro y veinte de la tarde partimos desde Casares con dirección de la iglesia bajando por la cuesta de “Lombo jurde” para pasar por el río de la ropas cual subiendo a la pista nueva del bozanco por la loma de los sarruitos.
Para pasar el río necesite la ayuda del buen amigo: Fernando Martín Duarte (calé), quien se prestó voluntario para pasarme a sus costillas, el cauce del río; tengo que reconocer que pasé bastante miedo, ya que bajaba bastante agua.
El recorrido fue espectacular, sacamos muchas fotos al tiempo que contemplábamos la belleza panorámica que ofrecen estos parajes; bajamos por “arrosegur” para adentrarnos en esta bonita alquería de A segur, donde tomamos unas cervezas en el “bar el puente”.
Seguidamente emprendemos carretera arriba para llegar a Casares sobre las ocho y cuarto de la tarde. El recorrido lo hicimos a mi ritmo que, ni yo mismo me lo creo, pues doy gracias a Dios el haberme dejado experimentar esta sensación, contemplar una vez más la belleza de mí querido Casares.
Casares, Casares mío, qué bonito se te ve, desde el otro lado del río cuando quiere atardecer.
Con tus casitas de piedra y con tus huertos pequeños, que parecen escaleras, adornan a nuestro pueblo. Tani
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